¿Cómo congelar verduras adecuadamente?
Ya sea por querer hacer una compra más grande para salir menos de casa, o porque te excediste un poquito en las cantidades la última vez, aprender a congelar verdura es una forma práctica de conservarla sin que se eche a perder. En este artículo te enseñamos cómo hacerlo adecuadamente, con cuáles puedes hacerlo y con cuáles no.
¿Qué pasa si se congelan las verduras?
Congelar verdura es un truco sencillo que permite que mantengamos la textura, el color y los nutrientes de (casi) cualquier verdura durante más tiempodel que pasaría si la tuviéramos en el cajón de la nevera, o al aire libre.
Esto se consigue ya que, al realizar el proceso correctamente, se eliminan las bacterias y patógenos que posee la verdura (al igual que al cocinarlas) y también se la priva del oxígeno que es el responsable de oxidar o “pudrir” la verdura.
¿Qué verduras se pueden congelar en crudo?
La mayoría de las verduras requieren ser blanqueadas – sumergir vegetales poco tiempo en agua hirviendo – antes de congelarse. Sin embargo, existen unas que no lo necesitan. Pero recuerda que ninguna verdura que congeles debes comerla cruda después, ya que su sabor en crudo habrá cambiado. Ahora sí, las verduras que puedes congelar crudas son:
- Brócoli y coliflor: estas dos verduras aguantan 1 año y 6 meses respectivamente congelados. Solo debes lavarlos bien antes de ponerlos en el congelador.
- Perejil: este durará unos 6 meses máximo en el congelador, solo deberás lavarlo bien y preferiblemente cortarlo para optimizar el espacio.
- Cebolla y ajo: ambos durarán hasta 6 meses en el congelador, aunque perderán la intensidad de su aroma con el paso del tiempo.
- Jengibre: puedes congelarlo con o sin piel para que, al descongelarlo, lo utilices directamente en la receta que estés preparando.
- Legumbres: casi todas las legumbres pueden ser congeladas sin mayor inconveniente, solo necesitarás dejarlas en remojo en agua unas horas antes.
- Mazorca de Maíz: este puede ser congelada entera o en granos, simplemente habiéndola lavado muy bien antes.
Recuerda, todas las verduras que quieras consumir crudas no deben ser congeladas antes. Especialmente aquellas que contengan mucha agua, como el pepino, no es recomendable que pasen por el proceso de congelado.
¿Qué verduras es mejor congelarlas ya cocidas?
Casi todas las verduras que no nombramos en el punto anterior pueden ser congeladas una vez sean escaldadas o blanqueadas. Para ello solo debes seguir estos pasos:
- En primer lugar, deberás lavar bien toda la verdura que vayas a congelar. Asegúrate de quitarle toda la tierra antes de los siguientes pasos.
- Coloca una olla con agua en el fuego para que hierva mientras realizas el paso 3.
- Ahora deberás cortarla en trozos para que, al momento de congelarla, ocupe menos espacio en el recipiente que elijas y también en el congelador.
- Utiliza una segunda olla y coloca agua muy fría en esta.
- Ahora coloca la verdura que vayas a congelar durante 1 a 3 minutos en el agua hirviendo y retírala. El tiempo dependerá del tipo de verdura que sea ya que las más blandas requieren menos tiempo que las duras.
- Al retirar la verdura del agua hirviendo colócala inmediatamente en el agua fría. Es recomendable que el agua fría la cambies en cada tanda de verduras ya que se templará con la verdura caliente, y es importante que esté muy fría al poner verdura nueva en ella.
- Una vez que las verduras se hayan enfriado las retirarás del agua fría y las secarás antes de envasarlas, ya que sino el agua con el frío al congelarse producirá quemaduras en tu verdura.
- Ahora con la verdura seca solo queda elegir el recipiente con el que lo almacenarás. El mejor método es sellado al vacío, pero tampoco es necesario que sea de esa manera. Puedes utilizar bolsas de cierre hermético y procurar dejar la menor cantidad de aire posible dentro, o también puedes elegir un túper o frascos.
Si decides utilizar tuppers o frascos asegúrate de dejar un dedo de distancia entre el contenido y la tapa, ya que muchas veces la verdura crece al congelarla.
Un último consejo que te será de gran utilidad es dejar escrito (en una agenda, una app, o en un papel dentro del recipiente) la fecha en que congelaste la verdura. Así sabrás exactamente cuánto tiempo lleva ahí.
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Blanquear y congelar tus verduras te permitirá conservarlas por mucho más tiempo eliminando las bacterias y patógenos que podrían contener. Pero este procedimiento no elimina los químicos utilizados durante su producción.
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